miércoles, 31 de agosto de 2011

Con la rentrée a cuestas


Acabo de volver de mis soñadas vacaciones. Es casi setiembre y estamos ya a más de la mitad del año; pero mientras en años anteriores comenzaba a estudiar la posibilidad de un verano en las playas, ahora me encuentro con la rentrée a cuestas.
Dícese de la acción de volver, la reanudación de las actividades luego de un período de vacaciones; en definitiva, la vuelta al ruedo.
Me dio curiosidad su significado, no había revista femenina francesa que no la tuviera impresa en sus titulares: "C´est la rentrée pas de panique!"... "Les 30 indispensables de la rentrée"..."Femmes politiques, leur secrets de la rentrée"... Y voiláaa!
A la vez que lucho con el ejército de mini cucarachas que poblaron mi baño, reviso los casi 500 mails que me llegaron del trabajo en este mes, otros tantos a los personales... había logrado una cuasi desconexíón total con el mundo sideral... y eso es fantásticamente sano.
Trato de reorganizarme en la pequeñez de mi departamento, confieso que había extrañado la intimidad de mi lugar, tantos cuartos de hostels por los que pasé, a veces con 4 otras con 8 personas, todas de diferentes nacionalidades respirando a mi lado. Suena un poco extraño.
Por fin la ropa en un sólo y acomodado lugar, orgullosa cuelgo las prendas adquiridas en Candem Town, la Bricklane Street... y HyM! (quiera Dios algun día llegue a estas latitudes, por mi bien y por el de mi hermana)
Mañana me reincorporo a mis madrugones y aún no me he actualizado de las noticias, veo que una de mis plantas está medio muerta y la heladera completamente vacía.
Si me miro al espejo puedo decir que tengo una cara de desencajetada bárbara, fruto del jetlag reciente y de tanto café que me enchufó a 220... pero como les acabo de escribir a mis amigas: "quien me quita lo bailao" ( con acento anduluuú!)
Todavía me laten los pies de tanto ajetreo al otro lado del charco: 10 ciudades, 7 países... en un mes. Récord alcanzado.
Ahora me quedan las canciones, olores, sabores, y por supuesto la melancolía subyacente... para la que soy especialista!
El calor húmedo en las playas de la Barceloneta, las metidas de pata a lo francés, el street style inglés, los desayunos de café latte y crossaint plains en el Hyde Park, las muchas estaciones de tren corriendo con mochilas pesadas.
Qué libertad la del otro mundo!! Donde uno se siente nada y todo al mismo tiempo...
Oh la lá! Rentrée Zennnnn!!